Nombre: Yoko Matsuri
Sexo: Mujer
Rango: Shinigami
Zampakutoh: Zaidaan. Es una simple katana de mango rojo, pero lo más destacable es su filo, el cual no tiene ese color del metal sino que es completamente negro como el carbón. Zaidaan en su mundo interior, es una pequeña niña rubia con un vestidito decorado con pequeñas partes de una armadura y que siempre lleva un hacha.
Shikai: Después de decir las palabras de liberación, Yoko clava la katana en el suelo y esta queda bañada por un resplandor de luz rojo sangre. La abertura que hizo la katana en el suelo se agranda cuando el tamaño del arma tambien lo hace, convirtiendose en un gran hacha roja y con dibujitos plateados, el arma que la pequeña Zaidaan lleva con ella.
• Filo veloz: es su primera tecnica, ya que el mango del hacha, en un punto determinado y si Yoko lo ve necesario, lo quita para quedar solo con el filo del arma, pudiendolo mover con mayor maestria.
• Lanza de sangre: Al quitar el mango del hacha, este queda inutilizable hasta que utiliza este ataque, con lo que el mango tiene una extraña aura y su tamaño aumento, pudiendo utilizarse como una lanza
Palabras de la Liberación: Desangermos, Zaidaan.
Bankai: No tiene.
Aspecto: Chica de piel ligeramente rosada, cuerpo sensual con marcadas y bonitas curvas. Su gran melena rojo-granate siempre va recogida en una alta coleta, decorada con dos palos chinos amarillos y una calavera rota como orquilla. Con unos bonitos y resaltantes ojos dorados tiene una mirada profunda. Su traje de shinigami es, en vez del convencional pantalon, una falda corta.
Carácter : Es muy extrovertida, alegre, alocada, vive la vida y es una bruta sin cuidado. Es muy exquisita en cuanto a los hombres, pero en cuanto encuentra al amor de su vida, su chico, su hombre, no para hasta conseguirlo. En las batallas es sumamente seria, cambiando su personalidad por completo.
Historia: Después de morir, Yoko llegó a la SS y estuvo en uno de los peores distritos del Rukongai, por lo que, con su mal caracter, cuando alguien se metía con ella o la tocaba o cualquier cosa, ella acababa en un montón de peleas.
En una de estas peleas, contra seis hombres armados con navajas, Yoko quedó atrapada y con alguna que otra herida. De pronto cuando uno de esos hombres iba a atacarla, apareció un shinigami el cual les dio una paliza a todos ellos y luego la ayudo a ir hasta casa. Le dijo que había visto su potencial de pelea, y que paseando por el Rukongai, habia notado un leve riatsu (antes la explicó lo que era riatsu, ya que ella no tenía idea) y que por eso se había acercado.
Después de la charla con aquel shinigami, Yoko decidió entrar en la academia de shinigamis. Siempre destaco muchísimo en el cuerpo a cuerpo y en la fuerza bruta, pero los kidohs, eran otro tema aparte. Poco a poco fue mejorando su capacidad con la espada en los combates y al final después de graduarse, sin duda alguna, fue enviada al 11º escuadrón.